– Marina Muñoz Cervera –
Las palomitas de maíz caseras, elaboradas con aceite de oliva, son más saludables que las comerciales.
Este picoteo clásico que continúa hoy en día puede ser o no saludable. El problema radica en el tipo de grasa (mantequilla, aceites vegetales) que se utiliza para su elaboración y, además, en los aditivos que les adicionan normalmente (sal o azúcar).
En tan solo 15 minutos, podemos preparar nuestras palomitas, con la tranquilidad de que nos van a sentar bien, no nos aportarán grasas trans, procedentes calentar los aceites vegetales ricos en grasas poliinsaturadas (girasol, soja, maíz, etc.), o bien, azúcares y sodio en exceso.
Ingredientes:
– 50 gramos de maíz para palomitas.
– 2 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen extra.
Elaboración:
Para hacer palomitas de maíz solo necesitamos una olla con tapadera.
En primer lugar, echamos el aceite y calentamos a fuego bajo, sin dejar que humee.
Cuando esté listo, añadimos el maíz. Subimos el fuego, tapamos la olla y dejamos que se frían. Podemos agitar la olla un poco para que las palomitas se hagan antes.
En 5 minutos o menos, escucharemos como va explotando el maíz. Movemos la olla nuevamente y dejamos que todos los granos de maíz estallen, sin destapar la olla, para evitar que salgan disparados.
Finalmente, y cuando ya hayan explotado todos los granos, destapamos la olla y añadimos un poquito de sal, para que resulten más apetitosas, pero es más sano comerlas sin aditivos.
¿Porqué se forman las palomitas de maíz?
A medida que se calientan los granos de maíz, su contenido en almidón se va transformando en dextrina y la humedad de su interior se va transformando en vapor de agua. La cáscara del grano impide que el vapor de agua salga al exterior y como consecuencia, aumenta la presión interna hasta que la piel del grano de maíz estalla y el agua se volatiliza.
¿Qué nutrientes buscamos en esta recetas?
Buscamos energía duradera. Las palomitas de maíz son ricas en almidones de absorción lenta y contienen fibra.
A pesar de que las palomitas son muy ricas en fibra y nos comemos el grano entero, no deberíamos comer mucha cantidad, si padecemos diabetes, porque tanto su índice como su carga glucémica son altas.
La subida de glucemia puede ser brusca si las consumimos con azúcar. Tampoco es conveniente comerlas con mucha sal, porque aumentamos nuestra cantidad diaria de sodio y un exceso de este mineral puede producir hipertensión arterial, entre otros problemas de salud.
También, contienen polifenoles, antioxidantes que nos ayudan a prevenir el envejecimiento celular. Y minerales, como calcio, potasio y fósforo. Entre las vitaminas, destaca su aporte en carotenos (precursores de la vitamina A) y vitamina K.
Podemos consumir palomitas de maíz en ocasiones, siempre y cuando las preparemos en casa.
¡¡Buen provecho¡¡
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